Ayer lunes publicó el Gobierno en funciones el Plan Presupuestario 2024 que ha enviado a la Comisión Europea

Pues bien: el Gobierno en funciones (a quien podríamos denominar como 'sanchismo') prevé que los ingresos del conjunto de las Administraciones Públicas en 2024 representen un 42% del PIB, alcanzando los 648.660 millones de euros en términos de contabilidad nacional. Se trata de un ligero incremento respecto al 41,9% del PIB de 2023.

¿Y de dónde va a salir ese dinero?

De los impuestos, lógicamente. En lugar de reducir el gasto público -hay miles de millones gastados innecesariamente-, el Ejecutivo prevé que en 2024 los impuestos alcancen los 382.755 millones de euros, lo que implica un incremento del 7,5% en comparación con 2023. 

En cuanto a las cotizaciones sociales, el Gobierno estima un incremento de las cotizaciones sociales del 6,4% para el año 2024, "por el dinamismo del mercado laboral" (o sea, nuevos puestos de trabajo) o "el despliegue de la reforma de las pensiones", señala el Ejecutivo. Sin embargo, no será así, porque el 72% de ingresos extra en cotizaciones serán por las subidas de cuotas y no por una mejora del empleo, según ABC. Es más: las cotizaciones sociales aportarán 1.500 millones de euros más en 2024, de los que 1.089 millones corresponden a los cambios regulatorios.

De esta manera, el Gobierno habrá elevado las bases máximas de cotización en más de un 13% en dos años -se elevaron un 8,6% en 2023-. Con ello, la base máxima de cotización ascendería en 2024 hasta los 4.720,3 euros al mes, es decir, 56.643,3 euros anuales (desde los 53.946 euros en que se encuentra en este momento).

Por su parte El Mundo añade este martes que España se sitúa, una vez más, en el grupo de cabeza de la eurozona en cuanto a la subida de la presión fiscal, en concreto, el Gobierno prevé elevar «la presión fiscal» de España en 2024 desde el 38,1% al 38,6% del Producto Interior Bruto (PIB). Y recuerda que según el Instituto de Estudios Económicos, en el «esfuerzo fiscal» –presión fiscal normalizada en función de la renta–, España se encuentra en máximos históricos del 42% del PIB, por encima de la media europea.

Conclusión: el Sanchismo nos asfixia fiscalmente, a las personas y a las empresas, para pagar la deuda pública que, lejos de disminuir, aumenta a marchas forzadas y sin ningún control.