Feijoó aún puede ganar, Sánchez aún puede perder
El presidente del PP fía sus posibilidades a la actitud del Rey Felipe VI frente a la ruptura de España.
Feijoó aún puede ganar, Sánchez aún puede perder
Primera jornada de la sesión de investidura en el Congreso de la Carrera de San Jerónimo. No ha ido tan mal como los tertulianos consignados -los que siguen consignas de Moncloa- habían previsto: por ahora, Feijóo, el perdedor, ha ganado el priMer asalto del combate. Feijoó aún puede ganar, Sánchez aún puede perder.
Óscar Puente enfanga la sesión de investidura. Lógico: recuerden que el progresismo, persona o partido político, siempre vive del erario público. Cuando un progresista pierde el cargo también pierde el sueldo
Además, en Ferraz, alguien debería decirle a Óscar Puente que comer con los dedos no resulta elegante. El portavoz socialista enfangó el debate y eso molesta a los ajenos y abochorna a los propios.
En cualquier caso, Alberto Nuñez Feijoó fía ahora sus posibilidades de llegar a la Moncloa a la actitud del Rey Felipe VI frente a la ruptura de España. La esperanza del PP consiste en que el Jefe del Estado, cuyo principal deber es asegurar la unidad de España, le pare a los pies a Sánchez. Ese es el consejo que le están dando al monarca; no nomine a Sánchez.
A Sánchez le preocupa una nueva convocatoria electoral. Falta mucho para enero: demasiado tiempo para seguir tomándole el pelo a los indepes
Decía que quien actuaba como portavoz socialista, Óscar Puente, enfangó la sesión de investidura... y Feijóo aprovechó que el Pisuerga pasa, precisamente por Valladolid, para comportarse como un perdedor honrado: yo no cedo ante el separatismo, como Pedro Sánchez, antes prefiero no llegar a Moncloa. Ayer, por vez primera, Feijóo ganó el debate a los socialistas y Pedro Sánchez cometió el mismo error que el presidente del PP, cuando no acudió al debate televisivo con Sánchez, Abascal y Yolanda Díaz.
Porque, además, a Sánchez le preocupa, y mucho, una nueva convocatoria electoral. Falta mucho para enero: demasiado tiempo para seguir tomándole el pelo a los indepes que necesitan ver cumplidas hasta aquellas promesas en las que no creen o que saben imposibles. No es lo mismo pedirles que esperen a una investidura de Sánchez, prevista para la segunda quincena de octubre a que esperan al gobierno que saldrá de unas elecciones en enero y que no estará disponible hasta abril. Una eternidad.
Al que conviene una segunda convocatoria electoral es a Feijoó: ha aprendido que no puede insultar a Vox y que la coalición progresista del Frente Popular es un portaaviones con muchas fisuras, tanta como ambiciones personales anidan en ella
Al que conviene una segunda convocatoria electoral es a Feijoó, porque ya ha aprendido que no puede insultar a Vox. Recuerden que en la manifestación del pasado domingo, convocada para el PP, acudieron muchos votantes de Vox. Y también ha aprendido el gallego que la coalición progresista del Frente Popular es un portaaviones con muchas fisuras, tantas como ambiciones personales anidan en ella. Además, recuerden que el buen progresista siempre vive del erario público: ellos y sus partidos políticos y cuando un progresista pierde el cargo también pierde el sueldo.
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